martes, 31 de julio de 2012

Otro predicador

No te preocupes. Otra vez estamos en 1987 y tú sigues siendo un estudiante de quinto de primaria. Tu mundo sigue completo y en orden. Nada, nada es vanidad, ni volverá a serlo nunca.




.

jueves, 26 de julio de 2012

Epifanía futura


Caravaggio: La conversión de Saulo, ca. 1600-1601


Casi en Sils-Maria. Casi, por poquito.

Camino de Damasco, dejo ir lo que siempre estuvo ausente.
 
Total, el futuro sí es generoso.





.

miércoles, 18 de julio de 2012

Una carta de Mariana Arteaga

La siguiente carta la recibí hoy de parte de Mariana Arteaga, amiga y mujer de danza, quien responde a una entrada de este blog. Reproduzco la misiva con su amable consentimiento:



Mi querido Inti:

Estaba yo en chinga, buscando reseñas para completar esta famosa beca que sacó Hacienda para la producción nacional de danza cuando... llego por casualidad, a un blog tuyo donde hablas de tu gusto por Sala Tomada y la comparas con un caso semejante: SOLAR que se había llevado a cabo en el CCUT [Centro Cultural Universitario Tlateloco, en México, DF] poniendo entre comillas que se presentaba como una obra «propositiva» y «cuestionadora». Seguí leyendo tu texto, donde mencionabas que era de lo más pretenciosa y que fue un fracaso rotundo porque levantó altísimas expectativas pero se quedó «...en un ejercicio estudiantil de “creadores” con muchas palancas, influencias y conectes.»

[Mariana se refiere aquí a este escrito de este blog: http://intisantamaria.blogspot.mx/2010/10/buenas-intenciones-de-sala-tomada.html ]

Oh!!!! Debo confesar que entre que sonreí, me sorprendí, me saqué de onda reí —todo junto— al leer las referencias que pones sobre este proceso porque... jou, jou, SOLAR fue ideado, concebido y trabajado por Tania Solomonoff y por mí.

Y nada, que lo más curioso de todo es que me entraron muchas ganas de escribirte en este momento, a pesar de que pasó tanto tiempo —SOLAR y tu entrada de blog— para decirte que si algún día tuvieras interés, me encantaría sentarme a charlar contigo ampliamente sobre esta pieza. (A lo mejor ya pasó tiempo y qué más da, a lo mejor, por desempolvarte el asunto, te vuelve a dar cierta curiosidad.) El hecho que te haya parecido que fracasó o que percibas que fue muy, muy pretenciosa es algo que, por el momento, no puedo cambiar.

Lo que sí me dieron ganas de compartirte, es lo siguiente:

SOLAR no pretendió partir de un «cuestionamiento» hacia la audiencia, pero sí desde el ejercicio íntimo de cuestionamiento de los creadores hacia ellos mismos en diálogo con Tania, conmigo, con el CCUT. Jamás se pretendió cuestionar a «los otros». Para los que estuvimos adentro fue una experiencia de lo más propositiva!!!!! Fue un proceso de diálogo colectivo y de ir explorando metodologías posibles para concretar el proyecto y habitar ese maravilloso espacio. Puede que se haya logrado, o no... pero el trabajo fue un gran ejercicio de honestidad, incluso, si fuera el caso, para fracasar. Confieso que me sorprende muchísimo que haya levantado expectativas. Todos pensamos que causaría a lo mucho, curiosidad —te digo, lo que se vive adentro es otra cosa— porque SOLAR era nuestro experimento, nuestras búsquedas de abordajes escénicos.

En fin, todas son cosas para compartir, pero hay una cosa, en absoluto destiempo —ah, pero que cómo se me antojó aclararla hoy día contigo al leerla, sabiendo que eres una persona con la que puedo dialogar— que:

SOLAR JAMÁS JAMÁS JAMÁS JAMÁS JAMÁS JAMÁS fue un proyecto de «creadores» con muchas palancas, influencias y conectes. Esto me es fundamental decírtelo porque ahí estabas hablando de mí y de Tania, creadoras del proyecto y pa' que veas, tu percepción está (o estuvo) muy, muy equivocada. Solo eso. Ni Tania ni yo hemos trabajado concibiendo proyectos desde ese lugar, pero sí desde ser unas apasionadas de la danza y desde acciones concretas para impulsarla. SOLAR, por ejemplo, pasó por un amplísimo proceso antes de llegar a decidir el cuerpo creativo. Y no tuvo que ver la fama de nadie, sino de la capacidad de apertura y diálogo de los que finalmente fueron seleccionados. Y aquí sí vale la pena como ejercicio personal, limpiar (bien retro) mi nombre y el de mi comadre —la otra, por el momento, ni enterada, obvio—.

Quizás éste también sea un error de percepción sobre las personas que de repente nos hemos encontrado colaborando en plataformas más «visibles» o incluso «oficiales», pero es por eso, que para mí vale la pena aclarártelo. Porque si siguiéramos por ese camino, creo que la crítica constructiva solo se iría hacia un lado de la balanza y el posible flujo de diálogo se desvanecería y continuaríamos colocando a proyectos que nacen desde ciertas institucionalidades como lugares viciados. Y ya ves, hoy te cuento, desde este humilde espacio, que no siempre es así.

Yo, por lo pronto, hago este ejercicio contigo. Ojalá que algún día conversemos, a mí me gustaría.

Mientras tanto, sigo en chinga, rescatando mi pasado en reseñas por el mundo de la web!

Saludos

M.



Hasta aquí la carta de Mariana, una carta cuyos argumentos y ponderación son harto difíciles de hallar entre creadores.

domingo, 8 de julio de 2012

Lapsus

Desearía que el lapsus
hubiera sido interruptus,
que yo nunca hubiera
dicho que...

«Traidor, infidel, ingrato, sádico»,
me enjuició entonces con todo derecho.
Mas ya se morigeran mi ansiedad
y mi culpa.

«Eres un niño», me dijo.
Y yo le pido: «Ponte
el vestido de gala, mujer,
e interpreta tu papel
de Beatrice Portinari.»
Flâneur o clochard,
hago turismo
de amiga en amiga.

No hay tiempo para atardeceres tristes.
        Pero sólo
Nos llegan los gritos del megáfono.
        pienso en coños
En las calles se gesta la epopeya.
        y carajos.

«Sí: cruel, sádico», me digo.
Me respondo: «Eres un...»

 
 



(Poema de un no-poeta, escrito entre el 4 y el 8 de julio de 2012. México.)