viernes, 29 de mayo de 2020

Predicar entre los ya convertidos

Yo me siento dividido ante las discusiones.

Por un lado, sé que todos podemos equivocarnos, también que todos tenemos un sesgo, y que es difícil estar preparados acerca de una gran cantidad de temas.

Sin embargo, cada día soy más impaciente ante gente que no se sale de su "corralito" mental. Me he sorprendido a mí mismo diciendo que _ellos_ son escoria epitemológica, cabezas duras, lelos.

Eso me ha servido para reafirmar mi postura y para evitar la pérdida de tiempo que supone una discusión con —digamos— un conspiranoico o algún fan de Avelina Lésper.

Sin embargo, ello no me ayuda a salir de mi burbuja ni a que mis ideas alcancen a otras personas.

Me pregunto: ¿cuáles son los requisitos mínimos para que una discusión valga la pena? ¿Por qué hay gente que no parece tenerlos (se me ocurren: argumentos, información, investigación previa sobre el tema)? ¿Y por qué pienso que yo sí los tengo? ¿No me estoy portando como los que tanto critico?

Y lo más acuciante es: ¿la verdadera comunicación es posible? ¿No será que más bien nos pasamos la vida predicando entre quienes ya están previamente convencidos?
En fin...

No hay comentarios:

Publicar un comentario